Hijo de Antonio Sureda y Magdalena Ripoll, nació en Palma de Mallorca (Islas Baleares) el 30 de marzo de 1787, siendo bautizado el 1 de abril en la iglesia parroquial de San Jaime. Comenzó sus primeros estudios de arquitectura en la academia instalada en esa capital, donde manifestó gran aplicación en geometría y el arte de la montea, como más adelante en los principios de la delineación de los órdenes de arquitectura bajo la dirección de Isidro Velázquez. Por espacio de dos años se dedicó al estudio y práctica de la arquitectura como maestro gremial hasta que a principios de julio de 1828 se trasladó a Madrid para matricularse como alumno de la Academia de San Fernando. 

Ya en la corte asistió al estudio particular del teniente director de arquitectura Juan Miguel de Inclán al tiempo que presentó algunos trabajos en muestra de su aplicación en la arquitectura. Estos proyectos respondían a «una Yglesia Parroquial como para 200 vecinos» y «una casa de campo y labranza», diseños que fueron del agrado de la Academia por cuanto que  en la Junta de la Comisión de Arquitectura celebrada el 4 de diciembre de 1828 y la Junta General y Ordinaria del 7 del mismo mes  la institución académica le animó a que siguiera adelante con sus estudios.

El 26 de marzo de 1829 solicitó su admisión a los ejercicios para la clase de maestro arquitecto presentando como prueba de pensado el proyecto de una Aduana para una ciudad y puerto marítimo, adecuada a Palma de Mallorca (del A-1054 al A-1057) con su informe facultativo y el avance del coste de la obra, la partida de bautismo y la justificación de su conducta moral y política.

La Junta de la Comisión de Arquitectura reunida el 31 de marzo de 1829 examinó la obra y los documentos aportados, acordando el pase del pretendiente al resto de los ejercicios de reglamento. Fue admitido en la Junta Ordinaria del 5 de abril, fecha en la que le sortearon los programas de repente. Le tocaron en suerte los números 7, 85 y 65, los cuales respondieron respectivamente: «Ydear una puerta principal para una de las entradas de Madrid, con Registros y habitaciones para Administrador pral y Guardas», «La Hermita de una Santario con habitacion para el Patrono ó Administrador eclesiastico. Planta, fachada y corte» y «La fachada de un Palacio Real cuya mayor extension no exceda á mil pies castellanos, ni menos de quinientos, y su elevacion comprenderá piso bajo, principal y un medianino ó entresuelo, todo bajo la cornisa gral y particular de la misma.- Planta, alzado y corte». De los tres asuntos escogió el nº 85, es decir, Una ermita de un santuario con habitación para el patrono o administrador eclesiástico (A- 4034), elección que comunicó a la corporación el 8 de abril.

La Junta de Examen tuvo lugar el 13 de abril de 1829, asistiendo a ella como vocales los profesores Antonio López Aguado, Juan Antonio Cuervo, Juan Miguel de Inclán, Custodio Moreno, Antonio de Varas y Martín Fernández de Navarrete. Cotejada la obra de pensado con el ejercicio de repente que el interesado explicó una vez entrado en la sala, se procedió a la realización del examen teórico. Juan Sureda comenzó este nuevo ejercicio contestando a varias preguntas que le hicieron los profesores relativas a la belleza de los edificios, las proporciones para la simetría, el empuje de los arcos y el modo de atender a la seguridad de los edificios. También sobre la doctrina de los triángulos, las medidas de las superficies y las solideces para tasar las fábricas, como el método práctico para ejecutar la ermita que había diseñado. Asimismo, acerca del método práctico para realizar las bóvedas, los requisitos necesarios para que un edificio fuese perfecto y los conocimientos que, sobre derecho, debía tener un arquitecto para decidir como perito en los casos de litigio entre partes según las ordenanzas municipales. Por último, el modo de orientar y construir los cimientos replanteando el edificio, la fabricación de los arcos, el arreglo de sus dovelas y los órdenes de arquitectura. 

Satisfechos los examinadores con el mérito de las obras ejecutadas y las contestaciones dadas a las preguntas formuladas le vieron apto para ostentar el título de maestro arquitecto, grado que le fue concedido en la Junta Ordinaria del 10 de mayo de 1829, a los 41 años de edad. 

Dos años más tarde, la Academia censuró dos proyectos suyos para Mallorca: los planos para las obras ya ejecutadas en la fuente de Felanitx y los de un nuevo lavadero y abrevadero con aprovechamiento de sus aguas que debían servir después para riego, los cuales serían aprobados en la Junta Ordinaria del domingo 21 de agosto de 1831. 

Asimismo, llevó a cabo años más tarde en colaboración con Antonio Sureda los planos y el presupuesto de una carcel para Palma, que la Sección de Arquitectura del 20 de septiembre de 1853 encontró poco meditados y sin satisfacer las necesidades que esta clase de edificios requerían, es decir, una distribución que procurase la seguridad, comodidad y salubridad necesarias y al mismo tiempo la debida separación de sexos, edades y delitos. Era evidente que el pensamiento no cumplía con estas condiciones, pero además contenía otros defectos: una cocina compuesta de dos piezas pequeñas y sin luces que podía ser mayor a través de suprimir los tres calabozos dando luces por el patio; la falta de una pieza para mozos y una enfermería provisional que podría establecerse en el sitio destinado a calabozo frente al patio, por el que recibiría la ventilación;  la falta de una capilla en donde poder oir misa; ser inadecuado el sitio de los vigilantes; no estar señalado el destino de muchas de las piezas señaladas entre los números 28 y 41; la necesidad de suprimir las columnas del pórtico descubierto y sustituirlas por unos machoncillos; y por último,  los alzados no tenían el carácter y la forma que correspondía a este tipo de edificios. Ante todas estas objeciones, la Academia acordó en su Junta  General del 2 de octubre de 1853 devolver el proyecto a sus autores para su mejor estudio a fin de poder dotarlo a las necesidades y destino de la obra.

Arquitectura. Cárceles, 1842-1853. Sig. 2-30-2; Comisión de Arquitectura. Arquitectos, 1829. Sig. 2-9-1; Comisión de Arquitectura. Informes, 1821-1828. Sig. 1-30-1; Comisión de Arquitectura. Informes, 1829-1838. Sig. 1-30-3; Libro de actas de juntas ordinarias, generales y públicas, 1819-1830. Sig. 3-88; Libro de registro de maestros arquitectos aprobados por la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, 1816-1900. Sig. 3-154, nº 71.

Silvia Arbaiza Blanco-Soler
Profesor TU de la UPM