Hijo de Domingo Gandarias y Josefa Celeta, nació en Mendata (Vizcaya) el 23 de marzo de 1792, siendo bautizado ese mismo día en la iglesia parroquial de San Miguel. Se trasladó a Madrid a fin de cursar la carrera de arquitectura en la Academia de San Fernando, centro en el que se matriculó como alumno durante los años de 1817, 1818 y 1819. Siendo ebanista y carpintero estudió Aritmética y Geometría práctica en el Real Estudio de la calle Fuencarral dependiente de la Academia bajo la dirección de Alfonso Rodríguez, director de arquitectura de la Academia, teniente arquitecto mayor del Departamento Alto de Madrid y arquitecto del Real Sitio del Pardo y sus agregados. Examinado de ambas materias a mediados de 1818 y con algunos conocimientos de dibujo, fue habilitado para poder pasar a la sala de Arquitectura a fin de aprender los primeros rudimentos de la profesión. 
Como estudiante, obtuvo el 30 de abril de 1818 un premio en la clase de Geometría práctica en el Real Estudio de la calle de Fuencarral y en la Junta Extraordinaria celebrada el 28 de diciembre el Premio Semestral por la clase de Arquitectura después de ejecutar el diseño de un Capitel jónico (A-5625). 
El 14 de junio de 1819, el Supremo Consejo de Castilla le concedió el título de agrimensor, momento a partir del cual se dedicó a la construcción de edificios urbanos de particulares bajo las órdenes de Juan Bautista de Belaunzarán, arquitecto y director facultativo de la Sociedad de Seguros Mutuos de Incendios de Bilbao, con quien dirigió las casas de nueva planta para María de Loizaga y Francisco de Zubillaga, ambas en Guernica. Asimismo, las de Gregorio de Olaeta, Domingo de Gandarias y Antonio de Fresnedo en la década de los treinta en la misma villa, «una Casa urbana de nueba planta de á dos altos ó habitaciones y desban con las oficinas bajas en las calles principales de ella [...] Mereciendo […] nuestra satisfacción y del Publico por las atinadas distribuciones interiores y fachadas exteriores con las luces que la localidad ha permitido: Que el ultimo Edificio que ha ejecutado para el Señor de Olaeta hallandose como se halla en el Sitio mas publico y aventajado del Pueblo haciendo Crucero y esquina de dos calles ès de Silleria por sus dos fachadas con diversas, bellas y arregladas proporciones cuyo conjunto da regularidad y buen aspecto llama la atención de los espectadores decorando y haciendo buena vista en la Calle».
En 1839 trazó los planos de la nueva casa para habitación del cura de la iglesia parroquial de Santo Tomás de Arrazua (Vizcaya), junto con las condiciones y el avance del coste de la obra. Los diseños fueron reconocidos por un arquitecto académico de mérito, quien los aprobó en todas sus partes sin haber variado cosa alguna de lo ejecutado por Gandarias. Obtenida la licencia del provisor de la Diócesis de Calahorra, su construcción fue sacada a remate, abonando la postura Julián de Elorrieta, «vecino de la anteiglesia de Albarcequi», quien ejecutaría las obras bajo la dirección de Gandarias. 
El 28 de junio de 1841 solicitó de la Academia de San Fernando su admisión a los ejercicios para la clase de maestro arquitecto, presentando como prueba de pensado el proyecto de una Casa de campo dispuesta a erigirse en extramuros de esta M.N. villa de Guernica, para las veces que venga el rey N.S. y para la Diputación, en tiempos de Juntas del M.N. y M.L. Señorío de Vizcaya (A-1808 y A-1809), con su informe facultativo y el avance del coste de la obra, las certificaciones suscritas por Alfonso Rodríguez y Juan Bautista de Belaunzarán quienes acreditaban su práctica y conocimientos en la arquitectura, además de la justificación de su conducta moral y política.
La Junta de la Comisión de Arquitectura celebrada el 21 de septiembre de 1841 examinó la obra y los documentos aportados, pero, aunque sus miembros no le creyeron apto para ostentar el título de maestro arquitecto, le concedieron en su lugar el de maestro de obras. La Junta Ordinaria del 26 del mismo mes acordó comunicar al interesado el dictamen de la Comisión de Arquitectura, pero no sería hasta la Junta Ordinaria del 8 de octubre de 1843 cuando comparecería el interesado. Una vez sorteado los programas de repente, le tocaron en suerte los números 35, 48 y 5, los cuales respondieron respectivamente: «La disposición de una torre para la Iglesia de un Pueblo. Planta y alzado de su fachada y corte», «Proyectar en planta, fachada y corte una casa habitación para un cura Parroco inmediato á la Iglesia de solo un piso, y otra igual al lado opuesto que sirva para deposito de los enseres de la Parroquia y cuarto para el sacristán con la distribución de sus oficinas» y «Una casa de campo y labranza para un caballero particular. Planta, fachada y corte». De los tres asuntos escogió el nº 35, es decir, la Torre para una iglesia de un pueblo (A-3604), elección que comunicó a la corporación el 31 de octubre de 1843.
La Junta de Examen tuvo lugar la mañana del 16 de noviembre de 1843, asistiendo a ella como vocales Antonio Conde y González, Atilano Sanz, Eugenio de la Cámara y Juan Miguel de Inclán. Cotejada la obra de pensado con el ejercicio de repente que el interesado explicó una vez entrado en la sala, se procedió a la realización del examen teórico. Se le indicó a Gandarias la dificultad de la reparación de su torre en caso de haber fallado por su pie una vez construida, motivo por el que el interesado trató los apeos. A continuación, explicó las bóvedas, sus diferentes formas, nombres y funciones para centrarse en los órdenes con bastante extensión. Enseguida trató la medida de las bóvedas y los sólidos en general, hallando las de la bóveda esférica en superficie y solidez, como las del casquete esférico y la de una cúpula. Figuró a continuación un rectángulo y un cuadrado, explicando sobre los mismos los diferentes medios para cubrirlos con bóvedas. Finalmente, los profesores le hicieron varias preguntas relativas a la resistencia de las maderas, los replanteos y las tasaciones, así como otras tantas cuestiones sobre la práctica constructiva.
Satisfechos los examinadores con las obras practicadas como con las explicaciones y las contestaciones dadas a las preguntas formuladas le hallaron hábil para ostentar el título de maestro de obras por la totalidad de votos, grado que le fue concedido en la Junta Ordinaria del 3 de diciembre de 1843, a los 51 años de edad.
Por entonces, la iglesia de San Miguel de Mendata se encontraba necesitada de restauraciones, algunas de ellas llevadas a cabo años antes por el arquitecto Francisco María de Aguirre.  Una vez reparado el tejado, repuestas las tejas y renovada la sacristía como los pórticos Gandarias se hizo cargo del abovedamiento interior del templo en 1856. 

Comisión de Arquitectura. Informes, 1839-1850. Sig. 1-30-5; Comisión de Arquitectura. Maestros de Obras, 1789-1845. Sig. 2-23-5; Comisión de Arquitectura. Maestros de Obras, 1843. Sig. 2-18-5; Libro de actas de juntas ordinarias, extraordinarias, generales y públicas, 1839-1848. Sig. 3-90; Libro de registro de maestros de obras aprobados por la Real Academia, 1818-1886. Sig. 3-156, nº 182.

Silvia Arbaiza Blanco-Soler
Profesor TU de la UPM