Hijo de Juan Arduña y Catalina Sánchez, nació en Cádiz el 25 de enero de 1815, siendo bautizado cuatro días más tarde en la iglesia parroquial de San Lorenzo. Su hermano mayor Juan Simón obtuvo el título de maestro de obras por la Academia de San Fernando en la Junta Ordinaria del 31 de mayo de 1835, a los 42 años de edad.

Desde temprana edad se dedicó al estudio teórico de la arquitectura, adquiriendo los conocimientos principales correspondientes al dibujo de los órdenes, la delineación y el lavado al tiempo que se ejercitaba en la invención de algunos proyectos. Bajo la dirección del arquitecto Cayetano Bravo estudió la práctica de la profesión, siendo nombrado por su maestro aparejador de las obras que tenía a su cuidado. Esta comisión la ejerció posteriormente a satisfacción del arquitecto Juan de la Vega, teniente director de arquitectura de la Academia de Santa Cristina y arquitecto del Ayuntamiento de Cádiz con quien trabajó durante cuatro años como delineante y aparejador en las obras del Hospital Militar y en los edificios pertenecientes al Crédito Público. Gracias a una certificación de estudios librada por el catedrático Joaquín Riquelme tenemos constancia que asistió a dos cursos de Matemáticas entre 1843 y1845, habiendo sido examinado y aprobado de las materias de Aritmética, Elementos de álgebra, Geometría, Trigonometría plana, Geometría Práctica y Principios de la aplicación del álgebra a la geometría.

El 8 de julio de 1845 solicitó de la Academia de San Fernando su admisión a los ejercicios para la clase de arquitecto, presentando como prueba de pensado el proyecto de «una Carcel publica con destino a la referida ciudad de Cadiz», con su informe facultativo y el avance del coste de la obra, la certificación de práctica librada por el arquitecto Juan de la Vega, el certificado de los dos cursos de Matemáticas aprobados suscrito por Joaquín Riquelme, la fe de bautismo y la justificación de su conducta moral y política.

La Junta de la Comisión de Arquitectura celebrada el  22 de julio de 1845 examinó la obra y los documentos aportados, pero tras la votación secreta no hubo lugar al favorable informe de admisión. Este dictamen sería corroborado por la Academia en la Junta Ordinaria del 3 de agosto, no obstante, el 13 de septiembre Arduña volvió a solicitar su admisión a los ejercicios para la misma clase, presentando en esta ocasión como prueba de pensado un proyecto de mayor extensión y carácter que el anterior, aunque con el mismo destino.

La Junta de la Comisión de Arquitectura reunida el 16 de septiembre examinó la nueva obra, pero realizada la votación secreta obtuvo 3 votos contra 4, en vista de que la obra no correspondía a la clase que solicitaba sino más bien para la clase de maestro de obras. Por este motivo, se le comunicó que podría presentarla para su admisión a los ejercicios para dicho grado en caso de que así lo quisiese.

La Junta Ordinaria del 28 de septiembre aprobó la solicitud hecha por el interesado para ser admitido a los ejericios de maestro de obras. Le sortearon los programas de repente, tocándole en suerte los números 39, 21 y 31, los cuales respondieron respectivamente:   «Disponer un Puente de madera con un Arco de cien pies de Diametro y treinta de sagita ó radio menor. Planta, fachada y corte», «Una casa tahona para un Pueblo de tres mil vecinos, dispuesto en un paralelogramo con la oficina ó pieza de administracion y demás que se comprenda necesario á su uso. Planta, fachada y corte» y «Diseñar una cimbra para construir de canteria el arco de un Puente de cincuenta pies de diametro, señalando en este repartimiento de Dobelas». De los tres asuntos eligió una Casa tahona para una población de tres mil vecinos (A-2267), cuya elección comunicó a la corporación académica el 14 de noviembre de 1845.

La Junta de Examen tuvo lugar el 27 de enero de 1846, asistiendo a ella como vocales Juan Miguel de Inclán, Antonio Conde González, Atilano Sanz, Aníbal Álvarez, Eugenio de la Cámara y Marcial Antonio López. Una vez examinada la obra de repente advirtieron en ella defectos y el hecho de que no reunía las condiciones necesarias para ser aprobada, por lo que se mandó al pretendiente retirarse de la sala al no poder realizar el examen teórico. Posiblemente, mucho tuvo que ver en este resultado la fiebre gástrica que sufrió Arduña desde el 26 de octubre al 12 de noviembre de 1845 dejándole bastante débil por la dieta rigurosa que tuvo que seguir para su restablecimiento, de la cual tenemos constancia a través de un certificado firmado el 2 de abril de 1846 por el profesor de medicina Joaquín González Romero.

Los resultados obtenidos no desmotivaron a Arduña en su empeño por obtener el título oficial, pues en este mismo mes de abril solicitó de nuevo asunto para recibirse en la misma clase. La Junta de la Sección de Arquitectura celebrada la noche del viernes 1 de mayo le comunicó que debía sujetarse y practicar todos los ejercicios nuevamente como si nunca los hubiera ejecutado. Ante este dictamen, el interesado se puso en contacto con la Academia el 17 de junio de 1846 para solicitar su admisión a los ejercicios para la clase de maestro de obras, presentando como prueba de pensado el proyecto de  Un Consejo Real pª la Corte de Madrid con todas las oficinas que son necesarias como son, Salas pª las diferentes secciones, Salon del Consejo pleno, oficinas pª los seis ministerios con sus Secretarias general y particular (del A-3052 al A- 3054), con su correspondiente informe facultativo y el avance del coste de la obra.

La Junta de la Sección celebrada el 26 de junio aprobó la obra por la mayoría de votos, hecho por el que fue admitido al resto de los ejercicios de reglamento en la Junta General del 3 de julio. Le sortearon los programas de repente, tocándole en suerte los números 30, 38 y 9, los cuales respondieron respectivamente: «Disponer un matadero de reses mayores y menores para una ciudad con departamentos para deposito y romaneo. Planta, fachada y corte», «Diseñar una Casa particular entre tres medianerias de treinta pies de ancho por sesenta y cinco de largo. Planta, fachada y corte» y «Una casa consistorial para un Pueblo de 250 vecinos, con escuela de primeras letras y habitaciones para el Maestro, diseñada en planta, fachada y corte». De los tres asuntos eligió el nº 9, es decir, una Casa consistorial en un pueblo de 250 vecinos, con escuela de primeras letras y habitación para el maestro (A-2973), elección que comunicó el 30 de julio.

La Junta de Examen tuvo lugar la noche del 19 de agosto de 1846, acudiendo a ella como vocales Juan Miguel de Inclán, Atilano Sanz, Narciso Pascual y Colomer, Aníbal Álvarez, Eugenio de la Cámara y Marcial Antonio López. Cotejada la obra de pensado con la de repente que el interesado explicó una vez entrado en la sala, se procedió a la realización del examen teórico. Arduña principió este nuevo ejercicio tratando las figuras y sus clases, las regulares e irregulares; los modos de medir la superficie de un triángulo, la de su trapecio, la de un polígono regular y la de un círculo, pasando a explicar después los medios para hacer las tasaciones de un edificio, las operaciones necesarias para la construcción de una obra desde su replanteo, la construcción de zanjas, los medios de conocer el firme, construir los cimientos y muros. En seguida se introdujo en las cornisas, los despiezos de un arco de medio punto hechos por métodos diversos, la construcción de arcos, bóvedas, escaleras y los diversos materiales necesarios para la edificación.

Satisfechos los examinadores con las obras ejecutadas y las explicaciones dadas en el examen de preguntas, le hallaron hábil para ostentar el título de maestro de obras por 4 votos contra 1, grado que le fue concedido en la en la Junta General del 6 de septiembre de 1846, a los 31 años de edad.

Comisión de Arquitectura. Informes, 1839-1850. Sig. 1-30-5; Comisión de Arquitectura. Maestros de Obras, 1789-1845. Sig. 2-23-5; Comisión de Arquitectura. Maestros de Obras, 1846. Sig. 2-19-2; Libro de actas de juntas ordinarias, extraordinarias, generales y públicas, 1839-1848. Sig. 3-90; Libro de registro de maestros de obras aprobados por la Real Academia, 1818-1886. Sig. 3-156, nº 211.

Silvia Arbaiza Blanco-Soler
Profesor TU de la UPM